Dado en Cartago, á los treinta y un días del mes de octubre de mil ochocientos veintiún años. JUAN MANUEL DE CAÑAS JOAQUÍN CARAZO, Srio. de Cabildo En 19 de noviembre se publicó en los lugares acostumbrados de esta ciudad como está prevenido; lo certifico. CARAZO, Habitantes de la Provincia de Costa Rica. El Ayuntamiento Constitucional de la villa de Nicaragua, de común acuerdo con las Corporaciones del partido con el mando de armas, sus individuos de esta distinguida carrera, el clero secular y seglar y los ciudadanos de la primera distinción y conocimientos deseosos de eternizar la gloriosa época que comienza á renacer de una independencia política del Gobierno español, os hace los más vivos encarecimientos sobre la verdadera unidad de nuestros sentimientos. No ignoráis hermanos nuestros que cualquiera camino que adoptemos siempre que lo tomemos unidos nos hacemos inviolables, conservaremos nuestros derechos intactos y viviremos tranquilos y que la desgracia quiere sea la división de sentimientos la precursora de nuestra dicha para que no la disfrutemos sino á costa de sangre. No ignoráis hermanos, que la capital de Guatemala desentendiéndose de los verdaderos deseos de los pueblos. desde el centro mejicano hasta nosotros, no ha correspondido con la fidelidad que debía, pues al sacudirse el yugo de su dependencia la ha proclamado con el carácter de soberana. Su poder es impotente á todas luces para tamaña empresa especialmente negándosele tres numerosas provincias cuales son la de Nicaragua, Comayagua y Ciudad Real. La investidura que para este principio tomó fué paz, unión y amistad federativa; pero como desde sus principios fueron advertidos sus fines, tuvo la desgracia de no poder reunir á su voto pueblos libres y que tratan de sacudir despotismos y arbitrariedades. En este caso adopta otro partido, aun más horrendo el primero cual es soltar la rienda al desorden, tomar una ilimitada libertad para desacreditar por sus escritos que á todos cuantos han querido excusarse á su soñada soberanía; difundir papeles subversivos é indecorosos contra autoridades reconocidas legítimamente en nuestro sistema actual y cubriéndolos con el negro velo del egoísmo y despotismo para respaldar su sanguinaria pasión, sólo intenta poner en discordia hasta los más ínfimos pueblos en que antes predominaba valiéndose de cuantos medios sugiere la malicia. De esta parte han sido las relaciones anónimas que hau llegado á nosotros, pero su trabajo es ímprobo, pues un juramento solemne nos liga á reconocer nuestra independencia absoluta del Gobierno español, prestando nues tra unión al Imperio Mejicano bajo las tres garantías propuestas por su libertador y primer Jefe independiente el señor don Agustín Iturbide, reconociendo así mismo por firme, estable y legítimo al Gobierno Provisional, residente en la capital de León. De allí acabamos de tener comunicaciones en que con la mayor satisfacción vemos la unión en sentimientos que anima á las tres provincias indicadas, y aunque es verdad que en la nuestra la ciudad de Granada se ha separado de sus religiosos deberes y en la de Comayagua la villa de Tegucigalpa, pero una y otra viéndose aisladas no menos. convencidas de su error parece que lo detestan. Ahora pues, amados hermanos nuestros, os instamos con todas nuestras fuerzas; nuestro pacto está vinculado no sólo en lo justo de la causa porque propendemos y la general conveniencia que nos resulta, sino en los pactos de familia enlazada por interés y por sangre. Esta ligera recordación que únicamente nos permite la urgencia de la salida del correo, hará en esos corazones la sensación más benéfica que nos prometemos formando una sola familia ese con este pueblo, puesto que es la misma causa la que nos estrecha no á buscar vuestra amistad que es antigua sino á sellar con el indeleble carácter de la unión fraternal las operaciones uniformes del día. Esperamos pues, tengan á bien no dar oídos á los gritos subversivos de Guatemala, que parece se interesa en sembrar la destructora anarquía como fruto de sus antiguas pasiones, y la ambición de impetrar sobre nosotros desconociendo su importancia física para mantenernos en paz, unión verdadera y tranquilidad permanente. Este es el único objeto con que os dirigimos esta pequeña oración y esperamos no ser desatendidos en un pueblo culto, amante á su religión y á su patria. Nicaragua, 6 de noviembre de 1821. José Anselmo Barrios.-Silvestre Eva.-José Manuel Abarca.-Franco. Leoncio Selva.-Zenón Morales. Félix de la Torre. Esta Excelentísima Junta Consultiva de Gobierno dirige impresa ahora mismo á todos los Ayuntamientos una tabla para facilitar las elecciones de Diputados á las próximas Cortes Constituyentes. La asignación de esa nuestra Provincia fué formada sobre un censo de que acompaño á V. S. copia en lo conducente para que se vea á su población han quitado veintiocho mil almas ó poco menos, por ser cerca de sesenta y seis mil la totalidad de la Provincia, según los datos que yo tengo. que He expuesto estos datos á la Junta y representado el perjuicio que se hace á nuestra Provincia quitándole uno de los cuatro Diputados que la deben representar concluyendo que se dejase obrar á los Ayuntamientos conforme á la Constitución española que nos rige interinamente y se omitiese la tabla impresa que por ser formada sin censos exactos perjudicaba á los pueblos á más de que les da la idea falsa de que ha guardado toda la exactitud y equidad que demanda tan delicado negocio. Pero la Junta persuadida de que hay Ayuntamientos que no entienden la Constitución como sucede por. lo común con pueblos de indios, ha dejado correr la tabla y la instrucción impresa, no como una ley, pues no la puede hacer la Junta para pueblos independientes y en cierta desorganización sino como unas indicaciones de las condiciones y procederes que todos exigen de todos para la próxima celebración de su pacto social en el Congreso. Por lo mismo V. S. y los otros Ayuntamientos deben ver en censos exactos y autorizados que habrá en sus archivos cuanta es la población de la Provincia sin hacer caso de la tabla que supongo no arreglada á la verdad. Si todavía no hay censos, se pueden hacer con brevedad si los individuos de cada Ayuntamiento dividen en partes al respectivo territorio y empadronan cada uno la suya. |